domingo, 22 de enero de 2012

Un año para olvidar... bueno otro más...

Gracias a Dios que ya te fuiste 2011, gracias a Dios que no volverás.

Gracias a Dios que al final pude lograr conseguir algunas cosas, ¡vaya año de mierda!

Ahora ya estoy más tranquila, logré encontrar un empleo, y además fue super chistoso, porque al final tuve tres propuestas al mismo tiempo ¡y me quedé más o menos con las tres!

Mi nuevo lugar de trabajo es todo un reto.

Mis sobris estan creciendo hermosos y veo formarse mi meta

Sin duda este año y medio fue para evaluar, para pensar, para crecer, para perdonar... ahora que lo veo desde lejos me siento tranquila conmigo misma, se que no fallé a mis valores, que fui honesta ante todo y además que traté de hacer lo posible para que las cosas se dieran.

Es cierto que hubo momentos que no maneje bien las situaciones (honestamente me volví loca).

Así que estas líneas van para esas personas que involucré egoístamente en mi dolor y a las que quise echarle mierda (que a mi me sobraba en ese momento) y que aunque no estaban muy lejos de evitar muchas situaciones, no me corresponde a mi decidirlo, así que a todos ustedes: PERDON, lamento mucho haberlos involucrado y haberme vuelto loca, haber sido brutalmente impulsiva y honesta, especialmente contigo G. es una de las cosas que siempre pienso, que calladita me veo más linda.

Y a todas esas personas que a pesar de lo insoportable que estuve durante mucho tiempo estuvieron allí sosteniéndome y apoyándome para que de una vez por todas dejara de sentir lástima por mi misma y además dejara de ser tan desagradecida, porque sin duda en medio de toda esa nieve de metros que me cayó encima, surgieron lindas flores que iluminaron mi vida y mi camino, en especial (de nuevo) G :-) a ti y a los demás ¡GRACIAS!

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